Mi
amigo Nacho nos ha pedido una crónica de la carrera a los
participantes, a mi estas cosas me cuestan, por dejadez principalmente,
pero más que una crónica es un buen momento de exponer otras cosas.
Empecemos por la carrera, que es lo que se espera de una crónica sobre carreras de coches:
A
pesar de salir ganador del día, gracias a los puntos extra que obtuve
por la Pole, el día en sí fue mal. ¿Puede ir mal cuando ganas? Si. Para
empezar la carrocería que usé no es la adecuada para este trazado, pero
no tenía otra. Así que el coche no tenía capacidad de giro, cambiando el
setup solucioné el giro pero el tren trasero era muy inestable, opté
por dejar algo intermedio tirando más al subviraje.
En
la primera manga la bujía dijo adiós, y en la tercera manga cuando el
motor parecía ir bien, piso lo sucio en el exterior de la recta en el
momento de frenar y el coche se va a la valla, caja de servo de
dirección rota. La manga 2 fue la única limpia y sirvió para hacer la
Pole.
No
sabía cómo reparar lo del servo, Eloy me plantó uno encima de la mesa, y
Luís me dijo que quedaba media hora para salir, y si faltaba tiempo se
pedían los 10 min. Opté por embridar el servo y jugármela, si tenía que
desmontar el equipo de radio para cambiar el servo, recogía y me volvía a
casa.
Pruebo
el coche en los minutos previos a la salida de la final 1, la dirección
es extraña, no termina de ir recto y no siempre gira igual, sabía que
la fuerza del servo superaba a la brida, pero si no tenía ningún
incidente debería de aguantar.
Se
da la salida a la final 1, meto gas cuando oigo la bocina (por la
perspectiva no veía el coche) y el coche avanza contra dirección y desde
la pole, freno, dejo que pasen todos mientras intento/espero esquivar y
ser esquivado y retomo la carrera, ahora sí, en el sentido correcto.
Consigo reponerme del desastre de la salida y me coloco segundo a
escasos metros de Isaac, líder en ese momento cuando anuncian por
megafonía que la carrera es anulada debido a un fallo de cronometraje.
Se
retoma la salida de la primera final y ahora si, en el sentido
correcto. Los primeros minutos yendo líder con Nicolas pegado me obliga a
una intensa defensa, decido concentrarme en el vuelta a vuelta y dejar
de defenderme. Comienzo a abrir hueco sobre Nicolás a la par de que este
comienza a perderlo respecto a Isaac. Mi motor comienza a desfallecer
súbitamente, y veo como me empiezan a comer metros muy rápido. Algo
ocurre con Nicolás y es Isaac quién con pista limpia por delante
comienza a acercase a un ritmo que el motor me niega conservar. Decido
dejarlo respirar en varios puntos esperando su recuperación que nunca
llegó, cuando Isaac estaba pegado, solo podía cerrar todas las puertas y
acelerar antes de lo habitual buscando que una vuelta tras otra llegara
el final de carrera, pero a falta de tres vueltas entro colado en una
curva e Isaac no duda en ponerse en paralelo por el interior, así que no
tomo riesgo alguno y no pongo resistencia en una pelea inexistente. Me
conformo con terminar segundo y esperar a la final 2.
Antes
de la final 2, abro la baja al motor y reajusto el embrague. Salía
penúltimo, ya que la salida es inversa al resultado de la primera. Suena
la bocina y salgo primero de la primera curva, Isaac se coloca segundo y
viene a cola, así que solo me queda centrarme en no cometer error
alguno y esperar a que el motor no se venga abajo de nuevo. Tras unos
seis minutos, le llevo a Isaac un tercio de circuito aproximadamente, y
noto que de repente ya no está a esa distancia, algo le había pasado
pero seguía en pista. Cuando retomo referencias con él, lo tengo a pocos
metros delante para doblarlo, decido seguir mi ritmo ya que era bueno y
nada arriesgado, lo doblo y me voy yendo unos metros cuando el motor
dice que ya ha corrido demasiado y de nuevo pide ayuda. Ahora con una
vuelta de ventaja tomé la decisión de dejarlo respirar en 3 puntos y
mantener el ritmo, Isaac se desdoblo muy limpiamente y llegamos a meta.
¿Porqué
decía que era época de disfrutar?, pues porque los pocos que quedamos
nos tenemos mucho aprecio, disfrutamos de los logros de los demás y nos
vamos a casa igual de contentos independientemente del resultado.
Tras
la primera final había que felicitar a Isaac por ganar, por no fallar
una vuelta, por ser tan elegante en la pista, por aún saber que corría
mucho más que yo los últimos minutos, no tocarme y esperar al hueco que
obtuvo y la merecida victoria y por felicitarme en mi victoria con una
sonrisa de reconocimiento sincero.
A
Nicolás porque cuando íbamos pegados en los primeros compases, un
doblado me hizo frenar de golpe y cruzar el coche para no chocarle, el
no se aprovechó de ello, soltó gas y siguió detrás pegado. Y alegrarse
por la victoria reconociendo que ya era hora de que ganara una, eso
dicho de corazón se ve.
A
los Esparza, Eloy sin decir ni media servo en la mesa, y Alfonso porque
siempre es correcto dentro y fuera de la pista, un detallista de mucho
cuidado y las carreras sin el no serían las mismas.
Marcelo
no se escapa, intenta molestarnos lo menos posible, y aún haciéndolo
muy bien, siempre lleva un disculpa por no hacerlo mejor, sigue así, que
de una carrera a otra has mejorado casi un segundo, en un año a pelear.
Y
porque por fin, tras unos años, uno disfruta de un hobby que es para
olvidarse de los problemas de la vida y no para generarse más, te vas a
casa contento y sabiendo que todos están contentos, YA ERA HORA.
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